La colombofilia, como casi
todo en la vida, es cuestión de tiempo y el tiempo es oro. Se necesita tiempo
para que crezcan los pichones, se necesita tiempo para conseguir un buen
plantel de reproductores, se necesita tiempo para preparar un equipo de
viajeros, para cuidar a las palomas, para que hagan una buenas muda… tiempo, y
paciencia.
Pero el mismo tiempo
que pasa para nuestras palomas también pasa para nosotros y al contrario que lo
que pasa con ellas que todos los años podemos rejuvenecer el cuadro reproductor
introduciendo nuevos y más jóvenes ejemplares, y lo mismo con el equipo de
concurso, a nosotros lamentablemente no hay quien nos rejuvenezca.
Si cogemos un grupo de
palomas mediocre, les dedicamos nuestro esfuerzo, nuestro trabajo, dinero y
mucha paciencia, al cabo de los años conseguiremos una plantel de bunas palomas
que nos darán muchas satisfacciones y buenos resultados, pero ¿cuánto podemos
tardar en conseguir eso?.... tal vez toda la vida.
Esta es una forma de
llegar alto en colombofilia, pero para mi gusto demasiado lenta.
¿Cuánto tardó en
convertirse una paloma brava en un ave domestica? Posiblemente generaciones.
¿Cuánto tardó en convertirse esta paloma domestica en una paloma mensajera
capaz de volar cientos de kilómetros sin descanso? Pues más de 100 años.
Los colombófilos de
hoy en día somos afortunados pues podemos beneficiarnos del trabajo y la
dedicación de los colombófilos del pasado y no tenemos que comenzar a criar
palomas mensajeras partiendo de una paloma domestica, sino que ya podemos
partir de ejemplares seleccionados, generación tras generación por aquellos que
nos precedieron en el arte de la cría, preparación y selección de la paloma
mensajera.
Pero la paloma
mensajera no es algo estático, que ya haya evolucionado hasta su perfección y
cuyo trabajo haya finalizado, no todas las palomas que tiene anilla son aves
capaces de volar infatigablemente hasta regresar a su palomar. Muy al contrario
la mayor parte de los ejemplares criados año tras año tiene un escaso valor
deportivo, ya sea por sus condiciones físicas o por sus capacidades de
orientación, querencia al palomar y fortaleza de espíritu. Solamente algunos
ejemplares de las mejores “sangres” son adecuados para el vuelo de larga
distancia, solamente algunas líneas de palomas criadas en mayor o menor grado
de pureza, pero siempre juntando lo bueno con lo bueno nos van a permitir ganar
tiempo al tiempo, nos van a dar esas satisfacciones que buscamos.
continuara...
